
He conversado con vacías sillas de los vacíos pensamientos que a veces las ocupan.
Dicen que vacías están mejor aunque no cumplan su cometido.
Las entiendo, estoy de acuerdo.
Le he invitado a fumar y me ha recordado que es una silla.
Le he respondido que soy un cigarro vacío.
No me ha entendido.
Claro… Ni yo mismo me entiendo.