Como un café

Publicado: 30 octubre, 2015 en Absurdo, Conclusiones, Humor, Lecturas, Reflexiones
Etiquetas:

12195849_10208166903071335_790062385203410889_n

La ira es tan buena como un café o un cigarrillo. Una vida sin rencores es como una escena del Principito. Demasiado tenue, demasiado casta.

Deja un comentario