Se puede pensar y expresarse filosóficamente, o claramente (ambas formas son incompatibles para un mismo cerebro), y de ambas formas se llega siempre a la misma conclusión si hay inteligencia.
Coño u origen de la vida, para filósofos y pragmáticos, acaba siendo el receptáculo de la polla.
La filosofía es petulancia y la claridad e inmediatez dice que el tiempo es demasiado valioso para tirarlo a la mierda.
Filosofía y claridad.
Publicado: 17 diciembre, 2013 en Lecturas, ReflexionesEtiquetas:Iconoclasta, Pablo López Albadalejo, Reflexiones de Iconoclasta, Ultrajant
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