Bueno, no deja de ser estilosa la ilustración. A lo mejor en los niños pudiera llegar a causar efecto en lugar de risa. Y si además de fumar, dices mentiras, te crecerá la nariz.
El tabaco y el estilo
Publicado: 11 febrero, 2014 en Lecturas, ReflexionesEtiquetas:Iconoclasta, Pablo López Albadalejo, Reflexiones de Iconoclasta, Ultrajant
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