En cualquier otro país con un gobierno decente y medianamente honrado, lo de la hoja de tabaco no habría llegado a ningún tribunal, porque no es delito.
Pero en la Nueva y Normal España Penitenciaria Fascista del Coronavirus hay una auténtica fiebre de fascismo y cualquier burócrata o funcionario subnormal, tiene ansias de decretar prohibiciones y delitos donde antes no existían.
Y pronto cargarán contra las acelgas y lechugas, intentarán prohibirlas también.
El nuevo fascismo español, es mucho más peligroso de lo que nadie se imagina, esto es reír por no llorar.
Habrá muertos, y será gente inocente de cualquier delito.
Iconoclasta, el hombre. 