
Con este titular, el país o boe (boletín oficial del estado) del régimen penitenciario fascista español homosexual sanitario, ofrece un capítulo del catecismo del bozal homosexual.
Dice que es más obediente con el uso del bozal (mascarilla en jerga nazi) el madrileño. Es lógico, en Madrid tiene su sede arcoíris el Caudillo Penitenciario Fascista Español Homosexual Sanitario y la vida cerca de su órbita es más dura y restrictiva.
En cualquier caso, bravo por Barcelona, que se lo curra de lo lindo, con ovarios y cojones.
Decir también que para hacer más educativa y doctrinal la lección de catequesis fascista del bozal, el país lo ilustra con la parábola de un pobre cabestro obediente que, según el periódico, no ha dejado de usar el bozal en más de dos años. El bicho le dice compungido y aterrado al falso reportero, señalando a los barceloneses sin bozal en el vagón de metro, algo así como: “Perdónales, Caudillo Homosexual mío, porque no saben lo que hacen. Yo «mi contagié del covi» y lo pasé «mú malamente»”.
Y así se extiende la Palabra del Gobierno Penitenciario Fascista Español Homosexual Sanitario, por cada rincón de su reino y taifas, día tras día, insistente y machaconamente sin que falte jamás el dinero para pagar a la prostituta prensa.