
Archivos para junio, 2017
Cumple años Malena Morgan
Publicado: 23 junio, 2017 en Chusma, Cine, Citas, Conclusiones, Humor, ReflexionesEtiquetas:Citas, Humor, Iconoclasta, Música, Pablo López Albadalejo, Reflexiones de Iconoclasta, romanticismo, Ultrajant
Yo vapor
Publicado: 21 junio, 2017 en Amor cabrón, Maldito romanticismoEtiquetas:Amor cabrón, deseo, desesperación, Iconoclasta, metáfora, montaña, naturaleza, nube, Pablo López Albadalejo, romanticismo, sarcasmo, tragedia, Ultrajant

Es como si el planeta sintiera mi desdicha y me habla con metáforas en tristes e íntimos días de tormenta.
Como si me entendiera.
Podría haber sarcasmo por su parte, lo entendería. Yo soy sarcástico, soy la burla de mí mismo.
Pero lo peor, es que siento que se apena por mí, que soy un mini-ser digno de ser compadecido.
Y me da de lleno en la dignidad y fumo rabioso y hiero la corteza de los árboles para ser indigno de lástima.
El mundo dice que tú eres la poderosa y voluptuosa montaña.
Y yo la efímera nube que se arrastra por ti, sobre ti. Quisiera cubrirte toda; pero eres inabarcable.
Me empeño en amarte más allá de mi corta de vida, más allá de mi lugar.
No lo conseguiré plenamente, no hay tiempo y no soy más que vapor.
No soy poderoso, soy un mierda.
No importa, me basta arrastrarme sobre ti y sentir tu latido de vida.
Debí haber sido árbol para penetrarte, estar en lo más profundo de ti.
Alguien cometió un grave error conmigo.
Y solo soy un rebelde jirón de nube que se rebela contra el cielo. Que no quiere estar allá arriba, quiero estar contigo.
Si pudieras entrever por una milésima de segundo mi drama de amarte, la montaña se desmoronaría de pena.

Iconoclasta
Foto de Iconoclasta.
Tribunal superior
Publicado: 18 junio, 2017 en Chusma, Conclusiones, fotografía, Humor, ReflexionesEtiquetas:Citas, Humor, Iconoclasta, Música, Pablo López Albadalejo, Reflexiones de Iconoclasta, romanticismo, Ultrajant

La misma foto serviría para retratar a los miembros reunidos de un tribunal superior, consejo de ministros, consejo de administración de una empresa, consejo de directivos bancarios o el alto mando militar; de cualquier país elegido al azar.
La única diferencia es que cuando matan a las vacas, sirven de alimento.
Los otros rebaños citados solo sirven para robar, cobrar sin trabajar y hundir y arruinar personas.
Además, las vacas piensan y son hermosas.
Debería haber mataderos específicos para las especies no alimenticias.
Resurrección por abrasión
Publicado: 17 junio, 2017 en Conclusiones, fotografía, Maldito romanticismo, ReflexionesEtiquetas:Citas, Humor, Iconoclasta, Música, Pablo López Albadalejo, Reflexiones de Iconoclasta, romanticismo, Ultrajant

Ese sol cabrón que hace hervir la sangre de los árboles y sus cadáveres.
Resucita la savia impregnando el aire de resina caliente que hace la respiración espesa.
De ámbar redivivo.
De sangre que hierve.
Revivir para abrasarse…
Pobres mis árboles.
Despertando
Publicado: 17 junio, 2017 en Conclusiones, fotografía, Maldito romanticismo, ReflexionesEtiquetas:Citas, Humor, Iconoclasta, Música, Pablo López Albadalejo, Reflexiones de Iconoclasta, romanticismo, Ultrajant

Mi despertar es trauma: el cuerpo se niega a vivir un mismo día.
No se relaja, no nos relajamos a pesar de los años.
Como si no fuéramos de aquí, de esto.
El clima y la chusma
Publicado: 16 junio, 2017 en Chusma, Conclusiones, Histéricas, Humor, ReflexionesEtiquetas:Citas, Humor, Iconoclasta, Música, Pablo López Albadalejo, Reflexiones de Iconoclasta, romanticismo, Ultrajant

Existen dos climas para que la chusma se quede en casa o vaya por la calle lamentándose en alto con gran pesar. Como si tuvieran un cáncer en el culo que los irritara continuamente: el de «mucho calor» y el de «mucho frío».
Como si tuvieran un termómetro insertado en la polla o el coño, sus biorritmos y movimientos se rigen por esos dos parámetros que los inmoviliza o aletarga como gusanos que son.
Y como tienen un cerebro más básico que una pelota, dedicado casi en exclusiva a gobernar las tareas excrementicias, carecen de memoria a medio plazo y dicen siempre lo mismo: «este tiempo no es normal».
Y esto es bueno para mí porque la chusma que se mueve poco o nada, deja mucho espacio libre. Puedo mear con tranquilidad en cualquier parte sin que aparezca nadie para mirarme la polla.
Si tuviera el termostato del planeta, primero los abrasaría y luego congelaría los restos para evitar hedores nauseabundos.
Prefiero morir de insolación o congelación que de asco al seguir sus hábitos climáticos.
Cumple años Missy Peregrym
Publicado: 16 junio, 2017 en Chusma, Cine, Citas, Conclusiones, Humor, Lecturas, ReflexionesEtiquetas:Citas, Humor, Iconoclasta, Música, Pablo López Albadalejo, Reflexiones de Iconoclasta, romanticismo, Ultrajant
Solo carne
Publicado: 14 junio, 2017 en Maldito romanticismo, ReflexionesEtiquetas:alma, amor, Iconoclasta, muerte, Pablo López Albadalejo, pensamiento, prosa dramática, realidad, Reflexiones, Ultrajant, verdad, vida

Hay momentos en los que no puedo dejar libre la imaginación y he de ser real.
Tranquilizadoramente pragmático.
No tengo alma, solo soy carne.
Un cerebro a veces lerdo y otras ágil.
Depende de la química.
Depende de lo comido.
Soy un pene fláccido y otras veces erecto.
Depende del cansancio y del dolor.
Depende del amor.
Depende de la brutalidad.
Soy carne, vísceras y huesos.
No hay alma en mí.
Mi pensamiento es un caos de reacciones eléctro-químicas.
Lo sé porque cada noche, un segundo antes de apagar la lámpara, solo queda de mí unos objetos en la mesita.
Cuando muera será exactamente lo mismo. Quedará mi carne sin pensamiento dentro.
¿Es acaso el sueño un entrenamiento para morir?
Y solo trascenderá lo que quedó ahí: el tabaco un boli y papel.
Muerto no encontraré a nadie que deseo y amo, porque lo inexistente es inoperante.
Es necesario escribir lo obvio para la que imaginación no asuma el mando.
Para no enloquecer ingenuamente.
Y sin dignidad.
No puedo imaginar un pensamiento sin cuerpo. ¿Cómo se la metería a mi amada en caso de encontrarnos más allá de la carne?
¿Cómo besar sus labios, los cuatro, si son inexistentes?
Todo lo que no he conseguido será mi vergüenza y pesar durante esos segundos que tardan en extinguirse todas esas reacciones corporales.
Y si no hay alma, la bondad o la maldad son cosas que no se deben considerar en la vida. Solo el fin. La firme decisión de lograr lo que se ansia mientras existe el pensamiento.
El alma reside en las manos, en los ojos, en la nariz, en el cerebro. La carne está empapada de pensamiento. El semen es una idea espesa que se desliza lenta y se enfría rápidamente sin ella.
No esperes encontrarme cuando mueras tras años de haber muerto yo.
No soñemos con encuentros espirituales. Duele.
Es dolorosa la bendita mentira.
El pensamiento se corrompe antes que la carne.
Y no existe premio o castigo por los actos vitales cometidos u omitidos.
Por eso odio con la misma pasión que amo.
Y clavaría una navaja en un ser vivo con la misma obscenidad y brutalidad con la que te penetro.
Ante las cosas que quedarán en la mesita de noche, nadie podrá decir si fui bueno o malo.
Y ante la carne corrupta, no se consideran esas cosas. Hay que enterrar lo que apesta.
Y solo se podrá concluir que fui carne y huesos.
Tengo este momento de valentía y lucidez para reconocer lo que soy y lo que no ocurrirá.
Y escribo tranquilo, escribo bien. Dos veces bien ante la verdad sin subterfugios dulcificantes. Soy demasiado hombre para todo.
El humo del tabaco se filtra por dentro de las lentes de las gafas y me irrita los ojos dándoles apariencia de tristeza. En realidad desearía que el humo tuviera cuerpo para poderlo asesinar.
No tengo espíritu.
Solo soy acción y reacción instantánea, irreflexiva e instintiva.
Amarte es mi acto egoísta, porque todo vale y nada importa por estar junto a ti. Dentro de ti. Envolverte con mi pensamiento cárnico y carnal.
Cuando muera dejaré de amarte.
No existirás.
Es necesario decir lo obvio en voz alta o escribirlo con el puño tenso en el papel y así, odiar y amar a plena potencia y desinhibición.
Ser consciente de que lo que no ha ocurrido en la vida, ya no pasará.
La única eternidad es esa mesita de noche reflejada en mis ojos, si quedaran abiertos al morir.
Abiertos como los de los peces en el mostrador de un mercado.
Opacados a la vida…
A veces siento la locura de amar y otras me conformo con ser cruel.
Soy electro-química nada más.
Un reacción-pensamiento voluble, incontrolable y efímera.

Iconoclasta
Foto de Iconoclasta.
Martes y 13: la celebración de la imbecilidad
Publicado: 13 junio, 2017 en Chusma, Conclusiones, Histéricas, ReflexionesEtiquetas:Citas, Humor, Iconoclasta, Música, Pablo López Albadalejo, Reflexiones de Iconoclasta, romanticismo, Ultrajant

He escuchado una noticia muy ilustrativa de la deficiencia mental de los homínidos humanos: las aerolíneas han hecho importantes rebajas en los vuelos para hoy, puesto que la cobardía e ignorancia provoca que muchos idiotas no viajen por la superstición.
Es tan acusada la miseria humana, que a muchos los inmoviliza.
Cobardía e ignorancia sin ninguna dignidad, como si fuera gracioso de mierda.
Subnormales que cargan ordenadores, tablets y smartphones como si fueran inteligentes para hacerlo, se cagan pata abajo en un martes y 13.
Cambian los tiempos; pero los cobardes y los ignorantes son la misma mierda que eran hace milenios.
Ojalá se haga realidad que un día como este sea fatal.
Hace falta una buena hecatombe para que se renueve la línea sanguínea humana. Algo que ayude a esta evolución deteriorada.
Hay días que se me hace más notablemente desagradable compartir (inevitable) el aire que respira y exhala tanto asqueroso. Me hacen sentir sucio.
Hoy no, estoy lejos de ellos. No hay subnormales a mi alrededor.
Es un buen martes y 13 para mí.
Alguna explosión nuclear, no sé… Algo efectivo definitivamente sería lo ideal para hacer mejor el planeta y hacer la vida más bonita a todos los seres vivos no humanos.
Tiempos
Publicado: 12 junio, 2017 en Amor cabrón, Maldito romanticismoEtiquetas:Citas, Humor, Iconoclasta, Música, Pablo López Albadalejo, Reflexiones de Iconoclasta, romanticismo, Ultrajant

La constante presión de amarte hace del corazón una bomba sangrante de tiempo.
Tiempo de ansiar, tiempo de espera, tiempo muerto. Tiempos duros y húmedos.
Segundos que se derraman blancos por los testículos, el vientre y las ingles.
No me envejeces, no es lo que marca esos tiempos a los que me sometes.
Lo que destaca es mi absoluta dependencia de ti en cada segundo.
Sentimental y orgánicamente.
Mi reloj indica las horas con tus piernas y los días con tus ojos.
Mi reloj es de carne y suspira en mi muñeca recordándome que mi función en la vida es amarte y follarte.
