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Independientemente de lo que tu estado/dios predique por mucha dictadura que sea, si loas al asesino, eres de los suyos. O le temes hasta ser indigno.
Quien la pega, tarde o temprano la paga.
Ningún israelí debe ni puede olvidar los públicos aplausos y las celebraciones histéricas de felicidad de los palestinos por las víctimas del atentado que masacró a más de mil ciudadanos israelís, que su gobierno y amo hamas ejecutó mediante tortura, descuartizamiento, violación, disparos, explosivos y cremación de niños y adultos en octubre del 2023. Se emplearon a fondo durante horas para demostrar al mundo su crueldad sin límites, y así aprendiera el pervertido y decadente occidente y perro infiel consumista lo que le espera. Y ya lo creo que han aprendido los cobardes occidentales, vista la devoción hacia los terroristas moros y el súbito odio hacia los judíos.
Si yo aún odio al profesor que en mi niñez abofeteaba a mi hermano en clase, puedo imaginar el odio que sienten las familias y amistades de las víctimas israelíes por los asesinos y quienes los celebraron.
Es más fácil odiar que amar. El odio se desliza suave y tentador por la piel, más que las risas y celebraciones de los asesinos y sus seguidores serviles.
La misma histeria de ebria felicidad que mostraron al mundo miles de musulmanes con el atentado del 11S del 2001 de las torres gemelas.
El pueblo palestino demostró ser cien por cien hamas. Con las ciudades-cuartel subterráneas que construyeron con penuria y esfuerzo bajo sus casas y calles, quedó demostrado que Palestina es un pueblo que vive por y para el terrorismo de hamas.
Ha sacrificado durante décadas su bienestar ciudadano construyendo túneles y zulos en lugar de equipamientos básicos, para servir a sus amados exterminadores de judíos, su gobierno electo “democráticamente” dicen con la boca llena de espumarajos hipócritas.
Los palestinos que han muerto son víctimas directas de hamas, en ellos se han escudado los terroristas haciendo chantaje emocional a las pseudo democracias occidentales lloronas y decadentes, ignorantes hasta auto humillarse.
Antes de reírse de los muertos israelís, mucho antes, los palestinos vendieron el bienestar de sus hijos en pro de unos asesinos que buscan el poder y su riqueza en nombre de su alá.
Respecto a las sociedades consumistas occidentales (pseudo democracias como la española) no son piadosas o solidarias, son cobardes. No les gusta y les aterra que alguien se defienda y ponga su pusilánime decadencia en evidencia. Esas sociedades que con el coronavirus, un resfriado que los estados/dios anunciaron como peste; se paralizaron y se “armaron” con los amuletos de la mascarilla, la vacuna que no vacuna y el nuevo cara al sol del siglo XXI: el “me quedo en casa”.
Y también cada pueblo, como ahora España, es culpable de odio mezquino y fariseo con sus alegrías y fobias, como lo fue el alemán de Hitler. No puede haber cerebro más podrido que el del que defiende a los asesinos por mandato político de su amo por “su necesidad y virtud”.
No, la sociedad de la Alemania nazi no es pasado, es de rabiosa actualidad, esta vez, en todo Occidente.
Quien ríe, acosa, señala, roba, agrede y humilla es responsable de lo que hace independientemente de lo que decrete su propio “ayatolá Sánchez” y cuando paguen por ello nadie gritará genocidio, será una guerra abierta. El enemigo no es un gobierno, es un pueblo, así funcionan las guerras desde que el ser humano perdió la gracia para alcanzar su actual degradación.
Genocidio es matar a tiros y hambre a la población como hizo Mao en China con su Gran Salto Adelante, los jemeres rojos en Camboya asesinando sistemáticamente a su población, Stalin en la URSS con sus Planes Quinquenales o el que llevó a cabo la Alemania de Hitler, su población eufórica de odio contra los judíos; aquellos alemanes eran responsables de los asesinatos como lo serán los españoles.
Y quien dice españoles, dice también Europa y USA.
En un genocidio la gente es asesinada sistemáticamente sin razones bélicas o estratégicas, fría y calculadamente, sin más motivo que la codicia de dinero/tierras y poder de un estado/dios propio o invasor.
Lo de Palestina no es genocidio, es una guerra abierta por ella misma. Los palestinos que huyen no son metidos en vagones para fabricar botones o peines con ellos y luego combustible. Es un pueblo en guerra que eligió su destino y tienen suerte: a los judíos los alemanes no les permitían ni huir.
Y los españoles serán responsables de sus propias muertes en una guerra o un “genocidio” como el que tanto lloran. Responsables de abrazar por cobardía y obediencia mezquina y fascista a los asesinos.
Los mezquinos españoles se cagan de miedo ante la posibilidad de ser degollados como israelíes; el gobierno español pro islámico tiene las ciudades atiborradas de musulmanes y claro, al igual que el español delataba al disidente con Franco y al que no llevaba la mascarilla del ayatolá Sánchez; ahora también delata al judío y al que no grita “genocidio”; el español de pura raza vende sus hijos al diablo por no ser degollado.
Y así, los judíos o israelíes tienen la culpa de todo por haberse defendido; pero en el fondo, este antisemitismo español es la envidia que corroe a “todas y todos”. Un pueblo que se defiende deja en evidencia a otros pueblos cobardes. Es algo inherente a la especie humana; ocurre que hay razas o etnias más mezquinas que otras. Y la española está orgullosa de ser hoy mezquina en un pódium.
En general, los decadentes occidentales consumistas sólo buscan interesadamente la simpatía de los terroristas en un vano intento por, algún día, no ser degollados también con sus hijos por terroristas moros.
Los israelíes no deberían haberse defendido para no enojar a los moros que viven en las ciudades occidentales (pseudo) democráticas. Deberían haberse sacrificado por el bienestar emocional de las naciones (pseudo) democráticas consumistas aniñadas y demasiado homosexualizadas.
Los políticos sucios de las pseudo democracias consumistas del coronavirus ven en sus poblaciones cobardes, quejumbrosas, dependientes e infantilizadas una borregada que les produce pingües beneficios con un mínimo gasto y el modelo de dictadura islámica asfixiante y de suma obediencia al estado/dios, es la meta de la política podrida y fascista que se inició con el coronavirus.
No existe cosa más vil y rastrera que un ciudadano integrado siguiendo todo mandamiento de su estado/dios con una fe tan ciega como la musulmana. Es el producto estrella de la selección de ganado humano que ha realizado el estado/dios a lo largo de los milenios.
Nadie acaba de darse cuenta de que la historia se repite cíclicamente, porque al fin y al cabo, el estado/dios pertenece a una especie endogámica y por tanto, humanamente fallida y hace las cosas mal una y otra y otra y otra vez. Por ello, los políticos sucios, corruptos, cerdos… Son una constante que surge en cada tiempo electoral o social, con sus complejos de napoleones analfabetos cuya única gracia es haber nacido de madres y padres con una genética también sucia, la endogamia de la riqueza.
Concluyendo:
Quien señala y acusa a las víctimas de los asesinos con la inmadurez infantil de una ideología inducida por los medios fascistas de las pseudo democracias, caerá inevitablemente bajo las armas y la esclavitud de los asesinos que defiende y justifica. El asesino o enemigo no le va a dar ni agua a los cobardes por mucho que lo hayan apoyado.
La chusma de la Alemania nazi ha vuelto con toda su mezquindad y miseria.
Y mientras viven y disfrutan falsas solidaridades, se olvidan de la corrupción y fascismo con el que su estado/dios les regala y humilla día sí y día también. Viven en sus peculiares guetos fascistas de realidad pervertida.
Esta época de hoy no es convulsa, es simplemente obscena para la dignidad y la ética.
Los asesinatos hechos virtud a conveniencia de un dictador y además, con alevosía e impunidad legal y ética; son feroz y mezquinamente celebrados. Una vergüenza más que adora la especie humana.
Y próximas generaciones humanas nacerán sin piernas para arrastrarse como gusanos, como consecuencia evolutiva de su obediencia rastrera.

Es fácil contestar a esos políticos y pensadores no españoles que no acaban de entender qué es España y su constitución. Sólo un humano nacido español es capaz de permitir lo que las personas decentes fuera de España no pueden entender y escandaliza. Y no es que lo permita, es que simplemente es incapaz de entender que pueda existir un gobierno y sus leyes, decentes y un ser humano con un mínimo de ética y honor en su forma de pensar y actuar.
El rey y ayatolá hispanocatalán Sánchez I el Arribista, sumo sacerdote masónico de la secta psoe, inventor de la Amnistía Corrupta Española 2024 y cobarde histórico; es la consecuencia o pus de una sociedad mezquina, degradada y analfabeta.
El ayatolá Sánchez I el Arribista es el reflejo aumentado y ruin de la raza humana española o una gran mayoría; y por ello hay tantos millones de humanos españoles sufriendo parafílico amor y fascinación por el estafador, criminal y patológico narcisista. Se sustenta además su gobierno en el indigno y cobarde proverbio español de cobardes, incapacitados e indigentes mentales: Más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer.
Es un ser tan aberrante y falso (un auténtico y real Uriah Heep de David Copperfield) que en personas con inquietudes de libertad y ética causa repelencia, un rechazo instantáneo como el que causa el acosador que te quiere vender una estafa de seguro o una nueva tarifa eléctrica sin dejar de hablar, con un burdo afán de robarte todo lo que tienes y pudieras tener.
Franco fue un molusco que surgió en la prehistoria, la España estancada y atrasada en pleno siglo XX que se cebó del hambre que mataba a miles de personas en provincias. Un auténtico y real tercer mundo en aquella república de élites políticas incapaces y endogámicas surgidas de las castas ricas con el fin probado de ver morir con indolencia al pueblo hambriento. Y cuyas medidas contra esa hambruna e indecencia socioeconómica de los trabajadores, consistía en perorar en las cortes sesudas e inútiles citas literarias. Realmente se había gestado una aristocracia política criminal por omisión, alevosía, diversión o todo a la vez, dependiendo del humor de aquellos hijos de puta niños ricos con complejo de humanistas de taberna. Permitiendo así, que aquel molusco que era Franco en la piel de España surgiera sin siquiera prestarle atención, entretenidos y divertidos con sus corrupciones y discursos pedantes hasta el vómito.
Sin embargo, el dictador y estafador Sánchez ha surgido de una sociedad degradada y decadente, tarada y marcada por un infantilismo adulto y consumista, la cobardía e ignorancia funcional (deletrear y leer las prohibiciones que el dictador imponga).
Si semejante individuo y su colonia infecciosa de mangantes ha accedido al poder infectando las instituciones, la ética, el conocimiento, la honestidad y la razón; no sólo se debe a la especial genética (a sus incapacidades y malformaciones mentales) de la raza humana española. Lo ha conseguido porque la constitución española es una chapuza “legal” mal, burda y premeditadamente redactada para beneficiar y cebar a los endogámicos aristócratas de la política, a los más criminales y mezquinos, a los más ignorantes e idiotas.

Todo estaba preparado para que surgiera la sepsis Sánchez y sus variadas cepas.
Aniquilar al actual gobierno corrupto, criminal y asfixiante y quemar la cochina constitución española que como un caldo de cultivo lo ha multiplicado; bien vale otra nueva guerra civil cuyas muertes, además, deberían servir para limpiar miles y miles de líneas genéticas sucias de indolencia, cobardía y servilismo hacia los podridos y repugnantes fascistas dictadores de toda ralea que florecen como cardos cada medio siglo en España.
La raza humana española es como el cerdo revolcándose en sus orines y excrementos: no puede dejar de hacerlo, es su genética. Y todo dictador vomitado por un coño español lo sabe y saca beneficio.
Ayer Franco y hoy el ayatolá Sánchez I el Arribista y su constitución de mierda que lo ha cebado porcinamente.
Y luego a por el siguiente y más allá…
Estamos abandonados.
Misericordia.

Captura de pantalla de un celular con la imagen de un hombre

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Leer de la ascensión del nazismo en Alemania es terrorífico, roba toda esperanza a la humanidad de tener algún tipo de bondad, ni siquiera elegancia; todo es mezquindad y felaciones al amo o estado/dios personificado en un “mesías”. Por muchas cosas buenas que haya hecho algún ser humano, es un error adjudicarlo a la especie humana. Es un insulto para el creador y una ruin usurpación por parte de la humanidad. No puede una obra de gran belleza o un avance importante de la medicina o la tecnología justificar bondad o sensibilidad en la humanidad tras sacar calcinados de un horno los huesos de un ser humano indefenso asesinado tras una agonía de tortura, sed, hambre y enfermedad. Tras cada asesino genocida jefe de estado hay millones de mezquinos apoyándolo, aclamándolo, votándolo. Denunciando a otros que piensan y actúan decentemente para obtener mezquino beneficio de su encarcelamiento o asesinato.

China comunista. Mao Zedong con su Revolución Cultural asesinó a veinte millones de personas en diez años, 1966-1977.

La especie humana no tiene inteligencia, sólo una maldad congénita que algunas religiones le han llamado “pecado original”. Escupe veneno y bilis en cada uno de sus actos y servilismo, lo hace con frecuencia: aupar al poder a las bestias más repugnantes y colaborar con el estado/dios asesino.
No ha ocurrido una vez, han sido y son aún hoy muchas en muchos lugares.

Holocausto judío 1933-1945. En la Alemania Nazi o Tercer Reich de Hitler. Entre once y doce millones de asesinatos, la mitad judíos y la otra mitad distintas razas y discapacitados psíquicos y físicos. Todo ello con la inestimable ayuda de toda la población alemana.

La especie humana no es inteligente ni destaca por su capacidad de hablar, destaca por ser mala y repulsiva, para ella misma y el resto de las especies animales. Es el hijoputismo mezquino lo que la define y merece, como ninguna otra especie animal del planeta, una pronta extinción.
Que una peste acabe con toda la humanidad antes de que un nuevo Hitler, Stalin, Leopoldo II, Idi Amin, etc., llegue al poder para enriquecerse con sus genocidios tan recurrentes y más que probables.
Esta degenerada, degradada y malnacida especie humana volverá a apoyar a los asesinos que están en ciernes o que aún no han nacido. Es algo tan seguro, tan infalible como la muerte.
Es imposible e incluso inmoral admirar a la especie humana. Odiarla es tan fácil como cortar un flan con una navaja de afeitar.
La filantropía debería considerarse complicidad con los genocidas. Y no hay genocida sin una masa humana que lo adore.

Genocidio del comunismo soviético. URSS de1922-1991. Régimen genocida: estalinismo (por Stalin): cien millones de asesinatos.

Y por muchos humanos que mueran en guerras y catástrofes naturales o civiles, hay una gran desgracia e injusticia en ello: nunca mueren los suficientes, ni en número ni en frecuencia como para extinguirse. Esta injusticia es la conclusión lógica que surge de revisar la historia.
La Mona Lisa, la capilla Sixtina o la Sagrada Familia no justifican los cadáveres que siembran los genocidas electos y aupados por millones de seres humanos mezquinos que actúan de cómplices, como el pueblo alemán con Hitler, el soviético con Stalin, el español con Franco…

Cruzada albigense 1209 y 1244. El 21-7-1209: de siete mil a ocho mil asesinatos. “Matadlos a todos, dios reconocerá a los suyos”, se dice que jaleó Arnaldo Amalric, legado papal e inquisidor.

Toda esa cháchara sensiblera de que la especie humana puede hacer lo más horrendo y lo más bello es una falacia, un mentira podrida. Lo más bello no lo hace la humanidad sólo lo pudre. Y sólo un par de excepciones de siglo en siglo entre millones de bestias ciegas y hambrientas de ser tocadas por su líder-dios-amo, son creadoras a las que la humanidad les ha robado su belleza y creación, adjudicándosela a sí misma. Esas excepciones confirman la regla de que la especie humana es un acto fallido y una peste que se ha de erradicar de la faz de la tierra. Sin juicios finales, con el fogonazo nuclear de un meteorito destructor o una guerra nuclear total. Excepciones que confirman mi regla misántropa y justa para con los inocentes que murieron y morirán y los dos o tres creadores que nacen cada cientos de años para que la globalidad humana parasite su arte y su inteligencia.
Caterva de sádicos hijos de puta los que matan, los que obedecen, los que miran, los que aplauden, los sordos de mierda…
Hay tantos indigentes mentales dispuestos a odiar y matar obedeciendo a su líder-estado-dios, que no es extraña esta náusea con la que me despierto cada día desde que tengo uso de razón. Desde que leí a Juan Salvador Gaviota una, y otra y otra y otra vez.
Y no mueren, no suficientemente rápido y en cantidad. Es algo que me mortifica, la mayor injusticia y error: sus vidas, pululan por el planeta como cucarachas ansiosas de dejar sus babas necróticas allá por donde se arrastran y dejan sus cadáveres.

Estado libre del Congo, 1885 a 1908. Propietario: el rey Leopoldo II de Bélgica. De dos a quince millones de asesinatos durante el régimen.

Fueron tantos millones de cerdos babosos alemanes odiando, humillando y matando a judíos que un día antes de que el retrasado mental de Hitler decretara el odio, eran amigos y vecinos; que mejor hubieran bombardeado toda Alemania con bombas atómicas y no hubiera quedado ningún mezquino vivo que transmitiera su piojoso mensaje genético.
Yo no he hecho nada parecido, ni siquiera he llevado el puto bozal nazi del coronavirus o mascarilla en jerga nazi “en exteriores” como hacían todos los cobardes serviles. Mucho menos hubiera denunciado a alguien por no llevarlo. Y más impensable sería que los no vacunados despertaran odio y miedo en mí, como tanto causaron entre la panda de bestias envidiosas, cobardes obedientes y aplaudidores del fascismo de la covid 19 que obedecían al puto estado “democrático” de mierda con fervor religioso cagón.
Puta chusma asquerosa…

Siglo XIII en Bukhara. Gengis Kan ordenó el exterminio de los mongoles Tata y todos los hombres Kankalis que fueran más altos que una rueda.

Si algo bueno tiene morir, es que dejas de estar entre tantos puercos.
Al final, la esclavitud resulta ser una especie de justicia que se aplica la humanidad a sí misma por ese hijoputismo que la pudre.
Y el estado/dios sabe como yo que su valor como especie es nulo, y por ello unas veces mata a los de izquierdas y otras a los de derechas, a blancos o negros, a moros o cristianos; como cerdos con peste porcina, sin remordimiento, sin escrúpulos. Matar cucarachas a nadie le pesa lo más mínimo. Sin embargo, siempre deja algunos vivos que le produzcan riqueza esclavizados.
La muerte es tan perezosa cuando de mezquinos, envidiosos y cobardes se trata…
Te das cuenta de que la muerte también es imbécil. Absolutamente idiota, incapaz de hacer su trabajo.

Masacre de Haití 1804. Entre febrero y abril fueron asesinados entre tres mil y cinco mil criollos franceses.

Misantropía para calmar la desesperación de pertenecer a esta despreciable especie humana. Este conocimiento, esta conciencia turbadora es el estigma con el que nací.
Y la mísera agua que un cura derramó en mi cabeza no la pudo lavar.
La chusma ignorante y servil no puede concebir y le ofende, que otros actúen sin pedir permiso. Que vivan sin el permiso de la ley del estado/dios, sea para bien o para mal. Y exclaman alarmados y furiosos de envidia: “¡Pero eso no es normal!” o “¡Está prohibido!”. La violencia contra esta gente debe ser instantánea porque su merma y degeneración cerebral arrastrará a otro nuevo genocidio.
La ponzoña que circula por las venas de la gente mezquina sin valor, que no sabría qué hacer con la libertad si la tuviera; hace que se revuelvan como ratas contra los que piensan y actúan libremente. Suelen ser los delatores que se meten en la boca los genitales de sus dictadores y muestran la sonrisa sucia y láctea de placer a sus amos.

República Dominicana, Masacre del Perejil, en seis días del 2 al 8 de octubre de 1937, treinta mil asesinatos.

En lugares como España y casi todas las naciones hispanoamericanas (por poner un ejemplo, porque las maneras se repiten en todos los continentes, en Extremo Oriente y el Medio) sometidos durante décadas a dictadores o caciques-generales corruptos y asesinos, países donde el estado/dios fascista (entiéndase falangismo, estalinismo, comunismo o liberalismo y conservadurismo, gobiernos religiosos de toda índole, etc.) ha matado a los individuos libres y sólo se han reproducido los que agasajan al asesino genocida o dictador. En estos lugares, la población actual es el resultado de una selección genética como la que se realiza con el ganado de crianza para el consumo humano. De ahí, que haya pueblos inclinados a mantener un dictador, lo llevan en la sangre y no lo pueden evitar. En cincuenta años de fascismo franquista, los españoles han sido sometidos a una grosera selección ganadera para que sólo sobrevivan los más mansos y serviles; los delatores que se enriquecieron con los que mataron traidoramente, quedándose con sus propiedades tras comerle la polla a un ministro, alcalde o un comisario de algún cuartel rural. Es algo que insisto, se repite en toda nación o región del planeta.

Genocidio camboyano cometido por Pol Pot de ideología estalinista-maoísta dirigiendo a sus Jemeres Rojos, escuadrones de la muerte. De un millón y medio a tres millones de asesinatos entre 1975 y 1979.

Razas humanas de distintas regiones del planeta que precisan en el día a día que un dictador les indique qué pensar, qué hacer, qué decir y sobre todo, cuándo y dónde pagar los diezmos al estado/dios. Ya sea en un banco o institución como en tiempos fascistas franquistas, o en la web adecuada con el fascismo estalinista actual surgido con el coronavirus en el 2020 D.C.
Realmente, desde los inicios de la historia sólo ha cambiado el decorado, la chusma es la misma. Y aunque hoy saben leer no acaban de entender el significado y precisan de emojis que les dé una pista de cómo se han de sentir al descifrar algunas palabras.
Y así es cómo han ido avanzando las dictaduras, tecnificándose para que el estado/dios reciba puntualmente sus diezmos y tener sometido a control a las reses o contribuyentes serviles, sumisos, crédulos en que esa papeleta que meten en una urna no sirve para limpiarse el culo, sino para otros fines menos escatológicos.
Una chusma seleccionada genéticamente que cuando el estado/dios y su mesías decrete que se debe odiar, se odie ciegamente y asesine en nombre de la patria, su ley, su justicia y a la puta que los parió a todos.

Primer genocidio documentado para algunos historiadores: Destrucción de Cartago 149-146 A.C. Tercera guerra púnica. 450.000 muertos y 50.000 esclavizados.

Cuando los abuelos dicen en “mis tiempos no era así” los nietos se sienten afortunados, ante un espejismo de modernidad y progreso comparándose con los abuelos. Es sólo atrezo, utillaje, oropel…
La ignorancia siempre lleva consigo el infantilismo adulto y su inmadura ingenuidad.
Respecto al carácter de la chusma o globalidad, es todo tan igual que lo ideal sería vivir en coma, ya que los sueños son interesantes y extraordinarios; cosa que en la vida tal como la entienden todas las civilizaciones del planeta, es todo mediocridad y los días se confunden porque son idénticos para los nacidos en cautividad (en una tiranía o pseudo democracia), la inmensa mayoría de la población de la Tierra ha sido parida en ciudades y pueblos, castrada de toda posibilidad de vivir en libertad, como los animales nacidos en un zoo.
Si en la antigüedad agitaban verduras, ramas podridas y basura para aclamar a su rey/amo/dios; hoy hacen clic en un iconito “me gusta/no me gusta” o bien “carita feliz/carita triste”. La iconografía de las actuales sociedades se ha adaptado a ese infantilismo con el fin de mermar más el intelecto de las reses explotadas. Se sienten infantilmente dichosos de haber practicado ese “salvaje” acto de libertad con la firme creencia de que han dado su opinión o aprobación. Es el problema de la ingenuidad antes citada, son tan tontos como si hubieran sido fabricados con plástico.

Masacre de Srebrenica, durante la guerra de Bosnia (el mayor asesinato masivo en Europa desde la Segunda Guerra Mundial) ejecutada por el general serbobosnio Radilav Kristić. Del 13 al 22 de julio de 1995. Asesinó por fusilamiento a 8372 musulmanes bosnios, incluidos los asesinatos de niños, adolescentes y ancianos para conseguir la definitiva limpieza étnica de la ciudad.

Por supuesto, el teléfono móvil es ni más ni menos que un cencerro para reses humanas en las granjas de explotación donde nacen y son criadas; también conocidas como ciudades, pueblos, barrios, guetos, asentamientos, campamentos… En las que viven estabuladas y verticalmente apiladas en unos míseros metros cuadrados que pagan a precio de cocaína y de putas y chaperos de lujo que compra y contrata su estado/dios amado cada día, parasitando su vida y esfuerzo.
Es indecente que los jerarcas de las naciones sean tan longevos. Una cuestión ésta que me hace chirriar los dientes durmiendo. Odio que la mala hierba nunca muera y odio que ya no exista un solo caballo que al pisar la tierra la convierta en páramo o desierto.
Todo son malas noticias, aciagos acontecimientos y una constante sodomía; es lógico que se prodigue tanto el cáncer de recto y boca.
La misantropía es mi única e inviolable libertad e inteligencia.
Mi conocimiento y experiencia.
Mi sabiduría.

Dios, si existes mátalos a todos, lo hiciste todo mal.

Carta

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El frío se apodera de los pies, los insensibiliza. Y las manos hace torpes.
En los ojos se congelan las lágrimas y en la nariz se forman carámbanos.
Los labios se agrietan haciendo de la sonrisa, si la hubiera, dolor.
Tal vez por esto, y tiempo más adelante por el oscurantismo de la eterna maldición del estado/dios, se inventaron las fiestas paganas y religiosas de invierno para dar consuelo y esperanza a los humanos esclavizados, estabulados y asfixiados por el estado/dios de atávicos tiempos, donde frío y muerte iban de la mano junto a osos y lobos hambrientos.
Hoy sólo queda un hipócrita banalidad consumista y la cobardía de una especie humana degradada hasta el punto de precisar un traumático reajuste genético que, si no fuera posible, extinción.

Foto de Iconoclasta.

Los gélidos y grises días de invierno deben ser registrados en la memoria mediante documentos gráficos, como fotos y dibujos y sus correspondientes reflexiones como prueba irrefutable de que has estado allí, que has deambulado sin morir por el páramo y el bosque a pesar del clima que predican. Has de acumular todos los documentos posibles que acrediten que eres un ser humano puro, íntegro. Atesorarlos como trofeos al valor y la determinación, como en los atávicos tiempos en los que el ser humano era capaz de sobrevivir sin un cochino estado/dios de mierda ladrón y asesino, que estropeó la especie humana seleccionando a los especímenes mansos y cobardes para poblar de contribuyentes y votantes sus granjas/ciudades de explotación humana ganadera.
Lo que provocó la práctica extinción de los seres humanos puros, valientes e independientes.
Debes recordar con tus memorias que jamás te has estabulado en casa por las homilías y bajo la protección del estado/dios ladrón y asesino. Y que ante todo no eres una de los miles de millones de reses humanas castradas de valor e independencia por el estado/dios ladrón y asesino.
Cuando te digan que eres como todos los demás, un gusano más entre miles de millones, admirarás con vanidad tus triunfos y absoluta independencia del estado/dios ladrón y asesino.
La actual especie humana que puebla las granjas de estabulación o ciudades de todo el planeta ha sido castrada desde tiempos inmemoriales y nacen emasculados de coraje y capacidad de esfuerzo; una selección ganadera/veterinaria que el dios/estado ladrón y asesino, que aún hoy día prosigue para crear humanos válidos para la explotación, con el objetivo de que en muy próximas generaciones nacerán con la capacidad intelectual mermada, listos para que sus seleccionados y pequeños cerebros sean llenados con las consignas fascistas homosexuales climáticas y sanitarias de la Agenda 2030 y sus mandamientos de amar y pagar al amo/presidente/dios/caudillo sin rechistar.
Pasarás de ser humano a insecto si no tienes tus triunfos y certezas imbatibles contra las doctrinas, salmos y mandamientos ganaderos que degradan la especie humana para enriquecer al estado/dios endogámico.
Ladrón y asesino.
Ladrón y asesino…
Los seres de la naturaleza viven bajo el frío aliento de la muerte. Se enfrentan al planeta sin un estado/dios ladrón y asesino que les predique normas o decretos. Nacieron con su instinto operativo para la vida. Y a los humanos, en las escuelas, destrozan y pervierten sus capacidades de supervivencia y libertad, con la esperanza de que un día, del coño de una madre surja un insecto mamífero.
El estado/dios ladrón y asesino ha destruido al ser humano.
Ladrón y asesino.
Ladrón y asesino…

Fotos de Iconoclasta.

Sólo la violenta y real brutalidad instintiva del ser humano puede resolver los problemas de fascismo y su esclavitud que padecen miles de millones de ilusos seres humanos ignorantes de ser mero ganado (la globalidad) a los que son sometidos por unos pocos de miles: el estado/dios.
Si no quedara nada de esa brutalidad, la especie humana debe considerarse extinta sin supersticiones de cambios climáticos, ella solita se ha extinguido por indolencia degenerativa.
La violencia es la fuerza que hizo inteligente al ser humano permitiéndole evolucionar en el hostil y competitivo planeta. Y es la única fuerza que puede salvarlo de la extinción total, antes de que los miles de millones de seres humanos se auto perciban convencidos de ser cucarachas o incluso amebas.
Y es fácil: unos miles de millones deben cazar y matar a unos pocos de miles que forman el estado/dios. Sería la batalla más corta y menos cruenta de la historia del planeta Tierra.
Porque hoy, en este instante, las pasarelas de reses de los mataderos del estado/dios no cesan de acarrear seres humanos hacia las salas de despiece, las que con sus ilusos votos “democráticos” han elegido, también ignorándolo por esa indolencia degenerativa en la que han caído.

Oscurantismo: Oposición sistemática a la difusión de la cultura.

De hecho, la cacareada “deconstrucción” es una forma de oscurantismo, pero mucho más venenosa al inocularse mediante dogmas, religiosamente, directamente en vena a la infancia.
Se debe hablar de perversión arribista, la ideología del estalinismo homosexual es pura degradación del conocimiento y la biología humana. Que sea de clara orientación musulmana da una idea del tipo de dictadura que el progresado woke en el estado desea para sacar más riqueza y servilismo de su casta paria o trabajadora.

«La reconstrucción de la memoria colectiva, por otro lado, no se limita a la época de Franco ni al ámbito de la Ley de Memoria. Desde muchos años atrás, y dentro de la creación de «conciencias locales» en las comunidades autónomas, los programas de enseñanza han apostado por reescribir la historia desde presupuestos ideológicos inequívocos: apología de las tribus prerromanas, elogio del islam invasor frente a la España cristiana de la Reconquista, condena de la conquista de América presentada como un genocidio, etc. Y eso cuando todas estas cosas se enseñan, porque los currículos de enseñanza media tienden a suprimir toda la historia previa a la Constitución de 1812. Lo más esperanzador es que, como reacción popular a todas estas políticas, por todas partes han surgido iniciativas que tratan de dibujar el verdadero perfil de la historia de España. Un pueblo que intenta reapropiarse de su historia. Ésa es, al margen de la España oficial, la gran cuestión de nuestro tiempo. Por eso hemos de contar de nuevo cuál ha sido nuestro camino. La siguiente página le corresponde escribirla al lector.»
(Te voy a contar tu historia» de José Javier Esparza, 2023)

Se habla mucho de “deconstrucción” en cuanto a las doctrinas políticas y sociales de los actuales totalitarismos estalinistas homosexuales de las pseudo democracias occidentales (Francia, Alemania, España, Bélgica, Canadá, Reino Unido, Australia…).
Deconstrucción (del estado, de las instituciones, de la historia, de la sexualidad, etc…) es un eufemismo falso e inaceptable, es sin tapujos un acto de perversión arribista de la realidad de la biología humana, historia, sociedad y política.
Los progres woke (homosexuales en definitiva) tanto políticos, docentes, escritores, cineastas, sanitarios, leguleyos (jueces, abogados y fiscales), policías, etc… Lanzaron a finales de la década pasada una campaña de perversión o adulteración global ajustada a sus intereses y ambiciones. Partiendo de su homosexualidad y patológico (por neurótico) narcisismo despótico, han hecho de ella excelencia y aplican su doctrina con agresividad sectaria sobre quien pueden por medio del poder legislativo, la coacción policial y judicial o el adoctrinamiento en los estudiantes que se ven obligados a pasar demasiadas horas del día soportando el ladrillo homosexual y su perversión en todo ámbito académico, matemáticas incluidas.
Es una continua cháchara de ramplón populismo exclusivamente para una población envejecida, degradada, decadente, omisa, cobarde, incapaz de razonamiento alguno y que no sabría usar su libertad si la tuviera. Hay etnias como la española que son auténticos reservorios de individuos adaptados al fascismo, sea woke islámico-estalinista o capitalista católico.
Eso de “deconstrucción” es un eufemismo que le viene demasiado grande al estado. Sólo es jerga woke que pretende darse trascendencia con pomposa estética semántica a una simple perversión que tiene como único fin el enriquecimiento de los sectarios de esta corriente pseudopolítica y social de arribismo homosexual. Es un fraude, y posiblemente, el más grande de la historia dejando de lado las divinidades y mitos de las actuales religiones.
La violencia tendrá que resolver esta perversión, porque no hay alternativa a este estalinismo homosexual-islámico (por increíble que pueda parecer), cada día más asfixiante y peligroso en su toxicidad corrupta y ruina económica producto de una corrupción institucionalizada y una pornográfica impunidad de los delincuentes políticos.

Los follaniños (pederastas) son una constante en toda época o sociedad. Unos marcadores naturales de los ecosistemas humanos para el control demográfico por medio de la caza y una forma de mantener el necesario estrés de alerta y supervivencia en los rebaños humanos. Vamos, que no se me duerman pensando que viven en disneylandia y que cuiden a sus crías en lugar de alucinar esnifando o comiendo setas del bosque.
Que aprendan, como yo, a detectar a un hijo de puta a la legua.
Sin embargo, lo que ha conseguido la cochina especie humana a lo largo de la historia con sus sectas religiosas, estados o gobiernos y leyes, es que estos marcadores biológicos se hayan reproducido ratonilmente haciéndose así, una nueva variante humana a la que se le debe respeto como a los terroristas musulmanes y tantos asesinos genocidas que han surgido en la historia moderna, algunos incluso elegidos (pseudo) “democráticamente”.
Y así viven pacíficamente entre sus víctimas (incluso en puestos clave del estado) y “aquí no pasa nada”, sin que nadie les preste atención a pesar de llevar la polla ensangrentada* por fuera del pantalón.
Las civilizaciones o sociedades con sus gobiernos o estados, a lo largo de la historia han conseguido mantener y aumentar lo más venenoso y repugnante del ser humano y aniquilar nobleza, honestidad, valor, inteligencia y la fuerza para la decisión y el esfuerzo. Lo aniquilado es básico para que los joderosos sigan en el joder (de todos es sabido que poder siempre se ha escrito con “j”).
Un silogismo: La religión inventa el pecado y los pecadores que controlar y condenar. El estado inventa leyes para que haya delincuentes a los que apresar y la represión indiscriminada contra la población. Ergo el joder cría, engorda y alienta el crimen para mantener su riqueza originada con sus delitos, pecados, represiones, penitencias y condenas; creando codependencia psicológica y física en los humanos más tirados de la sociedad.
En una sociedad humana decente y libre de pecados y leyes los follaniños estarían muertos apenas llegaran a la adolescencia. La especie humana nació inteligente y el joder la idiotizó hasta ser lo que es hoy.

(*Por un respeto a las presas, debo utilizar un lenguaje claro y conciso, deliberadamente explícito sin eufemismos de mierda, no se fuera a dar el caso de que alguien piense que el depredador le ha hecho un favor a la presa, que es justo lo que van a predicar los progres del nazismo climático, sanitario y homosexual o Agenda 2030.)